«EN VOZ ALTA…»
Por: Claudia Heredia González
México, vive tiempos de cambios profundos. La llamada “Cuarta Transformación”, pone a prueba el interés público sobre los intereses personales y de grupo. La visión de transformación trazada desde el mandato de Andrés Manuel López Obrador, ahora ex Presidente, continúa inspirando a las huestes del Partido que llevó a Claudia a ser la primera presidenta de México y también de Norteamérica.
El peso de la historia, sobre los hombros de Sheinbaum, es realmente de encomio, porque no es cosa nada fácil, llevar a cuestas, un legado de transformación, que frente a los ojos del mundo, ha tenido que enfrentarse a los «demonios del poder» enquistado particularmente en uno de los tres poderes que le dan sustento a la República, y con esto encarar el futuro global desde la Región del Norte de América, donde está llamada en este Siglo a marcar la diferencia, imprimiendo su propio sello como mujer gobernante.
Mucho más allá de ser mujer, Claudia Sheinbaum, es un ser humano, con inteligencia aguda, así como el aplomo, con el que ha aprendido a enfrentar la oposición en todas sus expresiones; no obstante tiene el mismo e igual compromiso que sus antecesores, todos varones, de llevar a buen puerto al país, en el espectro de los intereses de una Nación cada vez más decisiva en el espectro global, por lo que no puede ni debe dejar de lado los grandes desafíos que plantea el vecino país del Norte, Estados Unidos, con la reciente elección en que resultara ganador Donald J. Trump.
Claudia, la mandataria, tomó protesta un martes 1 de Octubre, y otro martes, el 5 de noviembre, en tierra azteca, la decisión de los Ministros de la Suprema Corte, sobre la supremacía constitucional en lo que respecta a la controvertida Reforma Judicial y la propuesta considerada por muchos como una “salida política” formulada por el Ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, ante las presiones frente a este sensible tema.
Sin embargo, tras el «estira y afloja» de este cambio profundo en el país, que contempla la elección popular de Jueces, Magistrados y Ministros, así como jueces sin rostro, el establecimiento de un Tribunal de Disciplina, entre otros aspectos, surge el proyecto de sentencia contra dichas impugnaciones presentadas por diversos partidos de “oposición” y que sobradamente sabemos al día de hoy, fueron desestimadas, confirmándose al calce la reforma judicial, con la sorpresiva decisión del voto del Ministro Alberto Pérez Dayán, quien a pesar de estar en contra de la reforma, en la histórica sesión plenaria, su voto en contra pero de la propuesta de su homólogo González Alcántara, a lo podría haberse pensando en una posible especie de «tregua» o vía alterna al «impasse» generado principalmente entre las altas esferas de los tres poderes del Estado.
Pero eso, no es todo, sino que ese mismo martes de celebración, se presenta otro escenario para la titular del Poder Ejecutivo, refiriéndonos a la elección en tierra yanqui, con un proceso eleccionario, visto desde afuera, de márgenes muy estrechos, pautadas por las encuestas nacionales en la Unión Americana, donde a final de ese día, la decisión del pueblo estadounidense, eligiendo como nuevo líder al magnate de ideología radical el Republicano Donald Trump, para los siguientes cuatro años, en lo que sería segundo mandato no consecutivo.
Esto sin duda, nos guste o no trae aparejada una serie de circunstancias en la vida política de ambas naciones en la relación bilateral, que se torna altamente complejo, que requerirá la sabiduría estratégica, para saber lidiar con un personaje que incluso raya en la misoginia, cuyas propuestas, son radicales amenazas contra nuestro país, al que ya dijo sellará la frontera, y la imposición de altos aranceles a la exportación, de no ceder a las peticiones y demandas que le imponga a México, por sus intereses estadounidenses.
Ante todo esto, la llamada de felicitación de la Dra. Sheinbaum, al futuro mandatario, con quien entabló según ha trascendido, una conversación cordial, donde el republicano, por cierto mandó saludar a Andrés Manuel, felicitando a la Presidenta, y abordaron lo inevitable la frontera México- Estados Unidos. Y que se verían muy pronto, no sabemos si a la toma de posesión, pudiera pensarse que si, habrá que esperar, tomando en consideración la alianza estratégica de México con Estados Unidos.
Por lo pronto, la mandataria federal, con «cabeza fría», como lo ha hecho frente a toda oposición que ha tenido que sortear con lo de la reforma judicial, ahora también deberá calcular cada movimiento, llevando a buen puerto, los grandes fines de nuestra Nación, sin olvidar que México, es el principal socio exportador de Estados Unidos, sin caer en las provocaciones del republicano, y viendo en todo momento por el bien de país, desde la perspectiva del exterior. La Dra. Claudia, tiene agallas. ¿Podrá ahora inclinar la balanza, para asegurar el futuro económico de México?
Ha demostrado firme liderazgo en llevar “a raja tabla” la reforma judicial en el país, con una mayoría en el Congreso, y de una Corte cuyo voto del Ministro Alberto Pérez Dayán, puso a modo las cosas, para dejar atrás el debate, y dejando el camino libre de obstáculos a la cuestionada y controversial reforma, en la que más allá del análisis técnico del tema judicial, en el sentido humano, existen muchas otras cuestiones, tal como las personas cuya reforma, ha envuelto e impactado con alcance inimaginable, hasta ahora. Justamente, esa es también una reflexión que no debería soslayarse.
Así que los retos del futuro global, marcando nuevas pautas en el espectro, a diferencia de que si en Estados Unidos, hubiese arribado al poder Kamala Harris, con una ideología más a menos cercana, a la que opera en nuestro país, por lo que las cosas, a decir en esta Tribuna, requerirá extraordinarios oficios diplomáticos, para lograr mantener la buena relación con el país más poderoso del mundo y que además es vecino de al lado.
Así que Sheinbaum, y los retos de un futuro global, abraza afortunadamente, el hecho de que México se ha caracterizado históricamente por el excelente manejo de las relaciones diplomáticas, además un canciller como Juan Ramón De la Fuente, con notable trayectoria y probado expertis como representante en la ONU, esperamos porque así nos conviene a todos en México, un contexto amigable y de alianza que supere los vaivenes en la balanza entre México y Estados Unidos, vecino estratégico, poderoso y ahora también con enérgico mandatario gringo.
¿Usted que opina? ¡Para eso es la Tribuna!
- Claudia Heredia, es mujer de leyes, ex catedrática universitaria en la UANL, UAT, así como Universidades privadas. Es «Embajadora por la Paz» Activista por los Derechos Humanos y la Educación en México.